Revista de Educación Religiosa, Volumen II, nº 2, 2020, DOI 10.38123/rer.v2i2.114

SCALA-AECA (2020). Encuentro Iberoamericano de Catequetas 2020. Ediciones Universidad Finis Terrae.

Introducción

El Encuentro Iberoamericano de Catequetas 2020 se llevó a cabo, de manera virtual, el 4 de diciembre de ese año. Su realización ha sido un esfuerzo de colaboración y sinodalidad porque logró reunir la Jornada que venía preparando la Asociación Española de Catequetas (AECA), para la recepción del nuevo Directorio para la Catequesis, y la petición que le hiciera el presidente de la Sociedad de Catequetas Latinoamericanos (SCALA) de unirse a esta Jornada con representación de las regiones Norte, Centro y Sur de América y Portugal. Intervino también un miembro del Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización (PCPNE) y el presidente del Equipo Europeo de Catequesis (EEC).

Estructura

La publicación es un compendio de diversas charlas y ponencias sobre las primeras impresiones y desafíos del nuevo Directorio para la Catequesis (23 de marzo de 2020). En la presentación, Mons. Diego Padrón pasa revista a los 17 artículos contenidos en este volumen. Destaca, a su juicio, la idea medular de cada uno de ellos, de modo que en unas cuantas páginas el lector puede enterarse sobre cuáles fueron los rasgos más sobresalientes del nuevo Directorio y, de paso, desarrolla algunos temas actuales relacionados con la catequesis. La estructura continúa con las palabras de apertura del presidente de AECA, Álvaro Ginel, sdb. Le siguen algunas “intuiciones” reunidas en nueve artículos. A continuación, una serie de siete textos que ofrecen una profundización del Directorio, ya que van presentando la génesis de este documento, los motivos por los cuales fue necesario redactarlo, y el proceso de amplia consulta que se llevó a cabo para su elaboración. Además, realizan una lectura crítica destacando las novedades, las bondades, las preocupaciones actuales del proceso evangelizador, el desafío por la formación de los catequistas de base, la desafección de muchos sacerdotes por la catequesis. Hay artículos que analizan en detalle las expresiones del Directorio encontrando, a juicio de sus autores, tanto luces como sombras. Hay también artículos que realizan un recorrido sucinto sobre los temas centrales del Directorio. Por último, se ve un esfuerzo interesante por definir la identidad de la catequesis realizando un recorrido desde las fuentes del catecumenado hasta llegar a nuestra sociedad postcristiana y secularizada, replanteando una renovación y una traducción del catecumenado al hoy de la Iglesia. Finalizan la presente obra las palabras de cierre del Rvdo. P. Andrés Boone, actual presidente de SCALA.

Quiero destacar en esta reseña aquellos artículos que presentan una rápida panorámica de la evolución, desafíos y situación de la catequesis y la recepción del nuevo Directorio para la Catequesis en los diversos países y regiones, que hacen que este encuentro sea “iberoamericano”. De este modo, nos topamos con una serie de trabajos que se refieren a la situación de la catequesis en distintas zonas geográficas y lo que el nuevo Directorio despierta en dichos contextos. Los autores repasan la recepción del Directorio para la Catequesis en España, en Centro y Norteamérica, Brasil, países bolivarianos y en el cono Sur de América. Tal como lo expresa Álvaro Ginel en sus palabras de apertura, “las lecturas del Directorio para la Catequesis son plurales y están condicionadas por la realidad desde donde es acogido, leído y reflexionado” (p. 31). Si, por un lado, estos artículos nos plantean cómo estamos parados en el ahora de la praxis catequística, también destacan aportes y nuevos énfasis de este Directorio. Por otro lado, estos autores constatan que los procesos iniciáticos no están cumpliendo su finalidad de engendrar a nuevos cristianos; está el fenómeno social y la cultura de la secularización, y la excesiva escolarización del proceso catequístico. Se enfatiza que el Directorio valore el proceso catecumenal, el acompañamiento personal y grupal, el interés por la fuerza de la religiosidad popular y el mundo de la discapacidad, la oportunidad de repensar los procesos formativos, tanto en centros teológicos como en la formación de catequistas de base.

En general, los artículos están enmarcados en el contexto de la pandemia que estamos viviendo. Esto ha producido un paso atrás en la renovación de la catequesis. Pero también, a juicio de los autores, ha abierto nuevas perspectivas, como la cultura digital, la que ven como una muestra de este cambio de época y que llama a la catequesis a descubrir y aprovechar estos nuevos lenguajes, aun cuando puede estar en peligro el contacto humano y el encuentro con la comunidad, ya que la catequesis sigue siendo ante todo una experiencia de relación. Los autores observan con preocupación una vuelta a la mera información, la centralidad que ha adquirido el contenido y la sobrevaloración de las ideas en detrimento de la narración. Hay quienes ven en la liturgia un eslabón importante para la catequesis en cuanto es el lugar de la memoria donde la comunidad funciona, se recupera la experiencia celebratoria y el sentido histórico salvífico. Otro tema destacado es el lugar que la familia ocupa en el nuevo Directorio. El confinamiento hizo que se volviera la mirada hacia la familia para que viva su vocación de iglesia doméstica, y todo esto en un contexto de descristianización progresiva.

Cierran esta obra las palabras dirigidas a los miembros de las asociaciones de catequetas de Europa y América Latina por el actual presidente de SCALA, el presbítero salesiano Andrés Boone.

Conclusión

Para el lector que quiera conocer cuáles son los desafíos y posibilidades a los que está enfrentada la catequesis, esta obra es de lectura obligada, pues permite no solo realizar una mirada selectiva de las principales temáticas, novedades y acentuaciones del nuevo Directorio para la Catequesis, sino que además presenta la panorámica global de las condiciones en que actualmente se realiza la catequesis y su lugar en el proceso evangelizador, pasando revista a diversos aspectos vitales que requieren planteamientos nuevos, tales como el lugar y formación de los y las catequistas, la dimensión catecumenal del proceso catequístico, la creciente y global descristianización de nuestras sociedades, el retroceso en la renovación de la catequesis que ha significado el flagelo de la pandemia, la preparación y recepción positiva de la cultura digital y la excesiva escolarización de los encuentros catequísticos.

Daniel Morales Figueroa
Departamento Arquidiocesano de Catequesis de Santiago, Chile